Libérate de la culpa, y sé la mamá que quieres ser.

Al convertirte en mamá, miles de emociones se vuelven parte de tu vida. Muchas de ellas son extraordinarias como el amor y la ternura incomparables que te provoca tu chiquit@. Sin embargo, la culpa también forma parte de estas emociones, por eso es importante conocerla y saber cómo deshacerte de ella.

La culpa es el resultado de una serie de pensamientos negativos que pueden surgir al tratar de ser una mamá perfecta, por lo que olvídate de esa idea. Cada mamá es diferente y única, el objetivo no es la perfección sino aprender, disfrutar y mejorar todos los días.

Además de la perfección, existen otras razones por las que puedes llegar a sentirte culpable. Veamos cuáles son:

• Por irte a trabajar en lugar de quedarte con tu bebé.
• Por quedarte en casa en lugar de ir a trabajar o sentir que estás descuidando tu carrera profesional.
• Por sentir que no estás dándole suficiente atención a tu pareja.
• Por pensar que no eres una buena mamá.
• Porque a veces le dejas comer comida que no es muy saludable.
• Porque no le dedicas el tiempo suficiente a consentirte.

Seguro te identificas con alguna de ellas, ¿no es cierto? No te preocupes, sin importar qué sea lo que te provoque sentirte culpable, a continuación te decimos cómo liberarte de la culpa:

1. Cuestiona lo que te hace sentir culpable: Reflexiona qué otras causas pueden estar detrás de lo que sientes. Siempre hay muchos factores involucrados en por qué pasa o no pasa algo, piensa en ellos. También hazte estas preguntas: ¿realmente por qué te estás sintiendo culpable?, ¿se puede hacer algo al respecto?

2. Pasa a la acción: Si hay algo con lo que no te sientes bien, algo que te genera malestar, en lugar de sentirte culpable haz algo para cambiarlo. Toma el control: ¿qué es lo que no te gusta o te hace sentir mal? Traza un plan para cambiarlo. Cambiar sensación por acción va a reducir el malestar, ya verás.

3. No eres la única responsable de la felicidad de tu hij@: Algunas mamás sienten que son las responsables de la felicidad de sus hij@s, pero la verdad no es justo ni realista: tu bebé es una persona que poco a poco irá aprendiendo a desenvolverse en el mundo. Tu papel es acompañarl@, darle mucho amor y la libertad para que descubra por su cuenta su felicidad.

4. ¿Qué es ser una buena mamá?: La respuesta como lo mencionamos anteriormente es muy subjetiva. El concepto de una buena mamá no debe causarte conflictos, olvídate de las expectativas o estándares, define tu propio concepto de buena mamá siendo tú misma.

Es inevitable sentir culpa, es una emoción que forma parte del amor y la importancia que le das a tu bebé, no obstante, debes aprender a manejarla y no dejar que te paralice. Algunas veces te vas a equivocar y está bien, algunas veces no te vas a sentir bien y también está bien. Recuerda siempre podemos mejorar, así que enfoca tu energía de forma positiva.